Entrevista con el Dr. Kai Vilanova, Investigador Consolidado del grupo de Imagen Médica del IDIBGI y profesional del Instituto de Diagnóstico por la Imagen (IDI). El Dr. Vilanova es el investigador principal del IDIBGI en el proyecto europeo ProCAncer-I, que estudia cómo utilizar la Inteligencia Artificial para mejorar el diagnóstico y tratamiento de cáncer de próstata.
¿Cuáles son los problemas con los que se encuentran hoy en día los profesionales en el diagnóstico, tratamiento y seguimiento del cáncer de próstata, que este proyecto quiere resolver?
Actualmente el cáncer de próstata se diagnostica con una resonancia magnética. La RM consiste en la adquisición de diferentes imágenes que proporcionan información morfológica y fisiológica de la próstata. La resonancia magnética proporciona unas 500-1000 imágenes que el radiólogo tiene que analizar para proporcionar un informe final del grado de sospecha de padecer cáncer de próstata. Este análisis de cada exploración implica la identificación manual de muchos parámetros. La posibilidad de disponer de un software que permita identificar y evaluar automáticamente todos los parámetros necesarios en una resonancia magnética supondría una gran ventaja para el trabajo del radiólogo. Este es precisamente uno de los principales objetivos del proyecto: desarrollar un software de análisis inteligente que ayude en el diagnóstico del cáncer de próstata.
¿Qué ventajas tendrá esta herramienta para la práctica clínica?
La posibilidad de disponer de un software inteligente de resonancia magnética de próstata supone un gran ahorro en el tiempo de análisis, pero también lo más importante es mejorar la precisión diagnóstica para detectar mejor el cáncer. Estas herramientas pueden detectar y clasificar lesiones sospechosas de cáncer de próstata, especialmente útiles en casos en los que las lesiones son muy pequeñas o difíciles de detectar a simple vista. El software de inteligencia artificial puede segmentar automáticamente la próstata, lo que ahorra tiempo y mejora la precisión al delinear los contornos de la glándula prostática. También permite la generación automática de informes, lo que ayuda a estandarizar y agilizar el proceso de elaboración de informes para el radiólogo. La inteligencia artificial puede analizar los resultados de la resonancia magnética y generar un informe con hallazgos relevantes y recomendaciones para el paciente.
Las herramientas tecnológicas desarrolladas por el proyecto mejorarán los resultados de los análisis de resonancia magnética de próstata realizados por los radiólogos en todas las fases del cáncer; desde el diagnóstico, la estadificación, el pronóstico, el tratamiento y la evitación de la recurrencia del cáncer.
Además, estas herramientas tecnológicas que el proyecto ProCAncer-I ha desarrollado, nos dan la oportunidad al personal sanitario de liberar parte de nuestra jornada laboral, dedicada a las visitas sanitarias, y utilizarla para continuar con la investigación para mejorar la salud de nuestros pacientes.
¿Cuáles son los retos y cómo van a superarlos?
Las principales dificultades en el desarrollo de estas herramientas se encuentran a distintos niveles. En primer lugar, la dificultad de reclutar la gran cantidad de datos de resonancia magnética y datos clínicos de más de 15.000 pacientes y también la necesidad de anonimizar todos estos datos. Por otro lado, uno de los principales retos de estos programas informáticos inteligentes es la dificultad para poder integrarse en todos los sistemas informáticos de los diferentes hospitales. Estas herramientas pueden funcionar cuando se desarrollan en el laboratorio, pero en la práctica clínica real pueden no funcionar correctamente. Por ello, una de las dificultades es poder validar estos programas informáticos inteligentes para su utilidad real en cualquier hospital. Aunque su adaptación y funcionamiento entraña cierta dificultad, el hecho de incorporar radiólogos como nosotros al consorcio internacional de ProCAncer_I también nos permite incluir nuestra perspectiva del funcionamiento del hospital y tenerla en cuenta desde el principio del diseño de la herramienta.
En definitiva, estamos seguros de que las ventajas de este nuevo sistema harán que merezca la pena dar este siguiente paso de integración en el futuro, para que el público pueda beneficiarse de los resultados del proyecto.
Esta entrevista forma parte del boletín mensual del proyecto europeo ProCAncer-I, puede leer la entrevista completa aquí.
